¿Cuál es la fecha de caducidad de los huevos? ¿Se pueden consumir los huevos pasada la fecha marcada en la cáscara?

Si te preguntas cuál es la fecha de caducidad de los huevos, si se pueden consumir los huevos pasada la fecha marcada en la cáscara, hasta cuándo se considera que un huevo es fresco… aquí tienes las respuestas, además de recordar qué significa la fecha de caducidad y la fecha de consumo preferente.

Sobre las fechas de caducidad y de consumo preferente de los alimentos sigue habiendo dudas entre la población, y si hablamos de alimentos que, aunque son básicos o de consumo habitual, también generan muchas dudas respecto a su conservación, manipulación y consumo, como son los huevos, nos encontramos con que son muy comunes las preguntas que lees en el titular, ¿cuál es la fecha de caducidad de los huevos? ¿Se pueden consumir los huevos pasada la fecha marcada en la cáscara?

Pues vamos paso a paso, primero vamos a recordar qué es la fecha de consumo preferente y qué es la fecha de caducidad, pues como ya hemos comentado, es un tema que todavía genera dudas y este desconocimiento da pie a que, ante la duda, se desperdicien muchos alimentos, no sólo los huevos. 

Los huevos se pueden consumir una vez pasada la fecha de consumo preferente, ya que ésta no condiciona la seguridad alimentaria, sólo que el alimento ya ha perdido parte de sus cualidades organolépticas y nutricionales. Vamos al detalle, a recordar qué es la fecha de caducidad y qué es la fecha de consumo preferente:

Fecha de Consumo Preferente

La ‘fecha de consumo preferente’ indica que una vez superada la marcada en el producto, se ha sobrepasado la fecha óptima de consumo, es decir, el periodo en el que el alimento ofrece todas sus cualidades nutricionales y organolépticas, por lo que la calidad del producto ha podido empezar a reducirse o a verse alteradas, la textura, el sabor, el olor… Pero si el producto se ha mantenido en las condiciones adecuadas de conservación, sigue siendo un alimento seguro, no hay que tirarlo a la basura porque no supone un riesgo de toxiinfección alimentaria.

En las etiquetas y envases de los productos se pueden ver distintas leyendas, tales como ‘Consumir preferentemente antes del… (si se indica el día)’ o ‘Consumir preferentemente antes del fin de o finales de… (si se indica el año)’.

Fecha de Caducidad

La ‘fecha de caducidad’ indica hasta cuándo un alimento es seguro. A partir de esta fecha, el producto no debe consumirse porque puede estar en mal estado e incluso ser peligroso por la presencia de bacterias patógenas. En el etiquetado o envase se especifica claramente la leyenda ‘Fecha de caducidad’ seguida de dicha fecha o de la indicación al lugar en el que está marcada en la etiqueta.

Pues bien, tras este recordatorio sobre las fechas de caducidad y consumo preferente, vamos a responder a las posibles dudas sobre los huevos y si se pueden comer después de la fecha marcada en su propio envase, en su cáscara. Y para responder a esta pregunta nos remitimos a la información ofrecida por el Instituto de Estudios del Huevo, que dice así:

"Si se han mantenido refrigerados, y tienen la cáscara intacta y limpia, los huevos se pueden comer durante unos días después de la fecha de consumo preferente.

Esta fecha de consumo preferente (no es fecha de caducidad) es como máximo de 28 días desde la fecha de puesta. Indica el tiempo durante el que los huevos se pueden considerar huevos frescos porque, bien conservados, mantienen su calidad y seguridad.

Los huevos cocinados a menor temperatura (o sin cocinar) deben ser huevos muy frescos. Los huevos menos frescos deben consumirse bien cocinados (hasta que estén completamente cuajados)."

¿Cómo conservar los huevos?

La respuesta a cómo conservar huevos es: en un sitio fresco, seco y a temperatura constante, y esto lo conseguimos en la nevera. Una vez que los compramos debemos guardarlos en la nevera inmediatamente y preferiblemente en el departamento que está destinado a ese fin. Suele estar en la puerta, una de las partes menos fría, además en un departamento aislado que se mantiene seco y evita la contaminación cruzada con otros alimentos.

Es muy importante evitar los cambios bruscos de temperatura en los huevos, pues si se dan, se puede provocar la condensación de agua en la cáscara y así aumenta el riesgo de contaminación, la humedad facilita la multiplicación de gérmenes.

Esto explica también por qué en los grandes establecimientos, los huevos no están en las neveras. 

Otra duda que puede surgir es si lavar los huevos antes de guardarlos, y la respuesta es no, ya que se destruye la fina película protectora de la cáscara y esto facilita la entrada de microorganismos a través de su porosidad. Así que el momento de lavar los huevos es justo antes de utilizarlos, secándolos muy bien antes de romperlos.

Fuente: gastronomiaycia.republica.com